En el Centro Cultural Taxco-Casa Borda

Ofrece Antonio Esparza taller de proyección y presencia escénica en el Festival Internacional de Guitarra de Taxco

El maestro e investigador compartió consejos con

instrumentistas para lograr mayor impacto en el público


Taxco de Alarcón, Guerrero. Hacer dibujos, colorear y evocar en la

mente paisajes, momentos, tonos, texturas, sonidos e imágenes

maravillosas, minutos antes de salir a dar un concierto, fueron algunos

de los consejos que el actor, dramaturgo, académicos e investigador

Antonio Esparza compartió con los músicos participantes en el 19

Concurso y Festival Internacional de Guitarra de Taxco.



Estas enseñanzas las comunicó en el Taller proyección y

presencia escénica para ejecutantes que el fundador de la compañía

teatral El Ejército Blanco dio a jóvenes guitarristas al utilizar

únicamente telas de colores, música, sillas y el cuerpo.



Antonio Esparza enseñó una serie de ejercicios que los artistas

pueden realizar para tener éxito en sus conciertos: asumir una postura

erguida, estar lleno de energía todo el tiempo, tener la vista fija en el

público y no en el piso, no devaluarse, mirar con el alma y dejarse ir.



El tallerista también reveló que un aspecto importante para que

un músico tenga presencia escénica transcendental es que se dé

cuenta que todo el arte, en especial el teatro y la música, es un acto

de magia.



Dentro de los consejos que el dramaturgo proporcionó destacan

algunos para superar el pánico escénico: imaginar que el público es un

objeto divertido, plantarse bien en el escenario y aprender a leer el

cuerpo para saber porqué y cómo reacciona ante un sobresalto.



Además de recomendar a los artistas jugar con su cuerpo todo el

tiempo, dijo que no tuvieran miedo de nada ni nadie, que se sintieran,

tocaran, quisieran, abrazaran y se grabarán tocando para después

escucharse y ver cuáles son sus errores.



Finalmente, Antonio Esparza dijo que para que un guitarrista

tenga una proyección y presencia escénica de gran impacto deberá

reírse de sí mismo, ser divertido, tener ilusiones y hacer música

“desde el alma”, para hacer que la gente sea feliz, se transforme y

haga que su vida sea menos aburrida.



LCL