Reconocen Trayectoria del periodista Julio Scherer en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires



• La obsesión de Scherer siempre fue evitar la censura y su flecha siempre fue rodearse de los mejores periodistas, comentó Fabrizio Mejía Madrid



• Lo que se tiene que subrayar es el papel que Scherer y Proceso han jugado como “educadores colectivos” de una parte muy importante de México, dijo Luis Hernández Navarro



• Él asumía un papel formador con los reporteros y siempre pugnaba porque ejercieran un “periodismo sin amarillismo, con rigor y con el dato preciso”, recordó Sanjuana Martínez



• Fernando Fernández se refirió al número especial de Viceversa dedicado al fundador de Proceso y que publicaron en abril de 1994



BUENOS AIRES, Argentina.- La trayectoria y la aportación que dio al periodismo mexicano Julio Scherer García, así como su lucha incansable contra la censura informativa, fueron reconocidos este viernes en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires en una charla-homenaje que el Gobierno del Distrito Federal, a través de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, organizó.



En el evento, que se llevó a cabo en el Stand CDMX que el Gobierno de la Ciudad de México instaló en las instalaciones del predio de La Rural, inició con la participación de Fabrizio Mejía Madrid, colaborador de la Revista Proceso, quien destacó que Scherer García se ha constituido como un personaje casi mítico y legendario que siempre lucho en contra de la censura y por la libertad de expresión y para ello buscó tener en su equipo a los mejores reporteros.



“Don Julio decía, ‘mire toda obsesión es circular y toda voluntad es recta, para romper una obsesión es necesario tener voluntad’. Yo creo que en el caso de Don Julio Scherer la obsesión circular siempre fue evitar la censura y su flecha, la que lo llevó hacia el destino deseado, siempre fue rodearse de los mejores periodistas”, comentó Mejía Madrid.



Por su parte, el periodista Luis Hernández Navarro, coordinador de opinión y articulista semanal del periódico La Jornada, destacó la personalidad incorruptible de Scherer García tanto en su etapa como reportero y sobre todo como director de Excélsior, primero, y de Proceso, posteriormente.



En este sentido recordó que en reiteradas ocasiones, en su etapa como reportero, se negó a recibir el dinero que los políticos y altos empresarios le ofrecían para que escribieran a su favor, hecho que le generó una serie de desencuentros con los periodista que sí recibían esos apoyos, quienes lo calificaban como una persona soberbia y que se sentía superior a ellos.



“Incluso”, agregó Hernández Navarro, “los funcionarios gubernamentales calificaban como una grosería y una falta de respeto”, el que no aceptara las cantidades económicas que le entregaban en sobres, algunas de las cuales procedían del entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz, quien le ofreció dinero durante una gira que se realizó por la ciudad de Praga.



Añadió que algo que se tiene que subrayar es el papel que Scherer y Proceso han jugado como “educadores colectivos”, ya que una parte muy importante del mundo intelectual mexicano, de mundo universitario mexicano y de la clase política se han educado a lo largo de todas éstas últimas décadas a partir de la información y de la visión del mundo de proceso.



“Se puede o no estar de acuerdo, se puede criticar o no, pero su impronta está ahí, es impresionante la forma en como ha marcado a una cantidad de integrantes del mundo de la política”, dijo.



En su oportunidad la ex reportera de Proceso Sanjuana Martínez, se refirió al papel tutelar y formador que asumía Scherer García con los reporteros a los que catalogaba como buenos y que los integraba al equipo de la redacción de Proceso, pero siempre pugnando porque ejercieran un “periodismo sin amarillismo, con rigor y con el dato preciso”.



“Julio dividía al mundo mediático en dos: en los buenos reporteros y los malos reporteros. Para él no había matices, entonces le seducía mucho encontrar un buen reportero, le encantaba, le llenaba de pasión, entonces fue creando y fue formando una serie de generaciones de periodistas”, comentó Martínez.



Finalmente, Fernando Fernández, ex director de la revista Viceversa, se refirió al número especial dedicado al fundador de Proceso y que publicaron en abril de 1994, destacando que pese a la insistencia no lo pudieron redondear con una entrevista a Scherer García, pues jamás se las proporcionó.



Añadió que en marzo de 1994, luego del asesinato del candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional, Luis Donaldo Colosio Murrieta, “Don Julio” le buscó para solicitarle que no publicara ese número, a lo que no accedió.