Abraza la música de la Orquesta Sinfónica Juvenil a las madres



· La Sinfónica Juvenil Ollin Yoliztli ofreció un emotivo concierto para celebrar a las mamás en el alcázar del Castillo de Chapultepec este domingo 10 de Mayo



· Bajo la dirección del maestro Rodrigo Elorduy Villela, los jóvenes intérpretes recibieron al término de cada pieza una ovación de pie

Las notas de la Sinfonía no. 25, del compositor austriaco Wolfgang Amadeus Mozart, fueron las encargadas de abrir el concierto que este domingo ofreció la Orquesta Sinfónica Juvenil Ollin Yoliztli e el Alcázar del Castillo de Chapultepec, en el marco de las celebraciones del Día de las Madres.



A las familias de los jóvenes músicos se unieron poco a poco, desde antes de que diera inicio la presentación, los paseantes que este 10 de Mayo eligieron el Bosque de Chapultepec para descansar y divertirse.



Bajo la batuta del maestro Rodrigo Elorduy Villela, la Orquesta Sinfónica Juvenil Ollin Yoliztli, interpretó piezas como la Pavana para una Infanta Difunta, de Maurice Ravel, Tierra de Temporal, de José Pablo Moncayo, además de Noche en árida montaña, de Modesto Mussorgsky, y para finalizar, recreó la famosa Marcha Eslava, del compositor ruso Piotr Ilyich Tchaikovsky.



Al término de cada una de las piezas, el público aplaudió de pie el talento del numeroso grupo de ejecutantes, todos alumnos de la Escuela de Música Vida y Movimiento del Centro Cultural Ollin Yoliztli.



A petición de los asistentes, los jóvenes interpretaron el final de la Marcha Eslava y después las tradicionales Mañanitas, como regalo para las madres.



Rodrigo Elorduy Villela agradeció la calidez del público y la oportunidad de presentarse en un lugar tan íntimo como el Alcázar del Castillo de Chapultepec, el cual permite al público recibir el impulso de los músicos y responder con entusiasmo.

“La Orquesta tocó muy bien, estoy muy agradecido no sólo con los muchachos, sino también con los maestros que nos apoyaron para que esto funcionara”, expresó al final del cincierto.



“Para ser una orquesta escolar, de jóvenes, algunos ya más avanzados que otros, tienen un nivel fantástico gracias a su trabajo en conjunto; entonces, para mí es un privilegio y un gusto trabajar con ellos”.



Mamás de los integrantes de la Orquesta, así como la madre del propio director artístico del ensamble, se mostraron emocionadas de ver y escuchar a sus hijos darles lo que para ellas constituyó el mejor regalo posible: un bello concierto en el mejor día de sus vidas.



El público se contagió del entusiasmo del festivo concierto y aplaudió de pie a los jóvenes músicos