Festival Encender un Fósforo, una plataforma de exhibición para procesos de investigación artística





· Se presentará el jueves 10, sábado 12 y domingo 13 de mayo en el Teatro de la Danza



El Festival Encender un Fósforo se ha posicionado como un encuentro de proyectos jóvenes y propuestas estéticas consolidadas que ha sabido cuestionar el campo de la danza, la coreografía y el performance, así como sus nuevas formas de presentación y propuestas de hibridación, además de vincular las formas de hacer desde una perspectiva interdisciplinaria, explica su creadora Alma Quintana.

Los protagonistas de este año llegarán al escenario del Teatro de la Danza, donde presentarán sus proyectos el jueves 10 de mayo a las 20:00, el sábado 12 a las 19:00 y domingo 13 a las 18:00. Cabe destacar que el festival es un esfuerzo independiente que ofrece funciones en diferentes espacios de varias instituciones culturales.

Quintana explica que el festival forma parte del diplomado que ella imparte y que lleva por nombre ¿Cómo encender un fósforo? Prácticas de investigación. Coreografía, Danza, Performance, que ha permitido mostrar aquellas prácticas en donde los procesos de investigación y creación de los participantes concluyen acompañados por obras y propuestas de artistas nacionales e internacionales.

Sobre la meta que se busca, la artista —quien ha sido becada por el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, Iberescena, EPRO Danza y danceWEB— comenta: “El Festival tiene el propósito de ensayar nuevas formas de relación entre formatos de visibilidad, pues la programación está ligada a la problematización del espacio escénico, no solamente para activar una indagación de sus características físicas, sino que se centrará en su potencial político. Asimismo, se plantea desbordar los campos disciplinarios o medios artísticos, para provocar la convivencia y la retroalimentación entre la danza, el performance, la escultura, la instalación, el video y la escritura desde una perspectiva coreográfica”.

Durante los días de este proyecto, el espectador será testigo de la diversidad de ideas que pueden surgir a partir del hecho escénico. Las piezas que se interpretarán son Figuras del Paisaje, Registros de una conversación, Pasaje hacia el doble, Ensayos Fakeclóricos, Balance Balanza, ¿Cómo se zapatea un gol? e Intento #1 (Box).

Figuras del Paisaje, de Jael Orea, es una obra que busca un espacio de libertad, exploración y juego dentro de la cotidianidad; el autor reflexiona sobre todo lo que llama su atención. En tanto que el proyecto Registros de una conversación, dirigido por Eduardo Gómez Escamilla, fue elaborado a partir del video-performance que muestra una serie de conversaciones guiadas para crear comunión. Se recurre a la voz tomando como referencia la atención plena y la hipnosis para ofrecer un diálogo corporal entre el proceso digestivo y las relaciones afectivas.

Pasaje hacia el doble, una idea original de Bárbara Lázara, parte de cuestionamientos como ¿cuáles son las condiciones del discurso en la sociedad mexicana actual?, ¿cuál es la relación entre los ciudadanos y los medios de comunicación?

Varios participantes del diplomado crearon Ensayos Fakeclóricos, que es un ensayo donde se problematiza lo folclórico, lo identitario y el imaginario. ¿Cómo construimos nuestra identidad, nuestro lugar en el mundo? ¿Qué es lo otro, la otredad, en Latinoamérica, en México? ¿El otro es el extranjero, el migrante, el de otra clase social, el distinto, el trans, el indígena, el pobre, el policía? ¿Cómo hacemos juicios del otro y lo clasificamos por su apariencia?

Las intérpretes Bárbara Foulkes y Ana Zambrano crearon la pieza Balance Balanza, que es una tercera versión de un performance que se ha presentado en tres lugares distintos pero únicos a la vez; en escena aparecen dos escaleras, una bolsa, un par de cables, dos cuerdas largas y una buena cuota de incertidumbre.

¿Cómo se zapatea un gol? es un trabajo de Juan Alberto Montes Zárate, basado en el texto Cerrado por fútbol de Eduardo Galeano. A través de esta propuesta, el autor busca desentrañar esas posibilidades de plenitud que tiene este deporte, el cual, a decir de Montes Zárate, ha sido desdeñado por las artes, ya que generalmente se piensa opuesto a su labor. La pieza explora esas vibraciones expansivas capaces de generar movimiento.

Finalmente, la obra Intento #1 (Box), coreografía y performance de Luis Alberto Montzi Ledo, parte de diversos cuestionamientos en torno a diversas formas, estructuras y técnicas de entrenamiento corporal; a partir de la relación entre el concepto de torpe versus hábil es que el autor explora sobre nuevos y diversos modos de aprender y de entrenar los reflejos en el cuerpo. Una inspiración principal es la técnica del box, así como el tiempo y proceso que requiere su práctica.

Para la organización de este año, Quintana contó con la colaboración de Silverio Orduña, curador y de Marta Sponzilli, coreógrafa y bailarina.