Que dejen toditos los sueños abiertos, un recorrido por el mundo con las canciones de Cri-Crí




· Se presentará del 28 de julio al 19 de agosto en el Teatro del Bosque, Julio Castillo, del Centro Cultural del Bosque


Que dejen toditos los sueños abiertos es un espectáculo familiar en el que el público viajará por el mundo a través de las canciones de Francisco Gabilondo Soler Cri-Crí.



En Argentina, grandes y chicos conocerán al Ché araña; luego partirán a la China en un barquito hecho de cáscara de nuez con un mosquito marinero. Ahí mismo encontrarán, en un jarrón, a un chinito atrapado en las garras de un dragón.



Jorobita, el camello que sufre de calor, espera en Arabia; en un castillo de España descubrirán a un fantasma bailarín, mientras que en México un jicote aguamielero les dará la bienvenida.



La música de Cri-Crí forma parte de la memoria colectiva de varias generaciones, afirmó Mario Iván Martínez, director del montaje, quien además dijo que abandonó la propuesta unipersonal para incorporar a dos artistas: Jimena Parés y Pablo Rodríguez, para retomar el esquema que Francisco Gabilondo Soler instituyó en la radio.



La obra, que ofrecerá funciones los sábados y domingos del 28 de julio al 19 de agosto a las 12:30, en el Teatro del Bosque, Julio Castillo, del Centro Cultural del Bosque, sigue una evolución escénica, donde los dos jóvenes actores en el inicio representan a dos niños que conocen a un cuentacuentos que los lleva a través de las canciones del Grillito cantor a un viaje por el mundo.



Mario Iván Martínez, quien se dice embajador de la obra de Cri-Crí, señaló además que se presentarán algunas obras poco conocidas, que fueron puestas en sus manos por Tiburcio Gabilondo, hijo del compositor. “Mi obligación como embajador es dar a conocer el material que ha quedado a la sombra”, aseguró el también actor.



Francisco Gabilondo echa mano de ritmos y géneros que prevalecen en el México mestizo, abordó todos los ritmos latinos, comentó Martínez.



Y agregó: Cuando escribe tango o música oriental, lo hace con todo el conocimiento de las armonías, de los ritmos que prevalecen en cada uno de esos géneros. Sin darnos cuenta nos puso en contacto con todos los géneros musicales posibles.



Don Pancho, dijo Mario Iván, fue un incansable viajero, un hombre renacentista de su tiempo, músico, artista y astrónomo, con una enorme sed de conocimiento. Disfrutamos mucho de hacer este homenaje, queremos que todos los papás compartan esta música hermosa con los niños, de calidad inigualable.



El actor y director añadió que es un privilegio regresar al Teatro del Bosque, Julio Castillo, donde se presentó su madre, la actriz Margarita Isabel, y donde él tuvo el privilegio de presentarse con Molière, de Sabina Berman.



“De niño, mientras mi mamá actuaba, yo iba al Teatro Orientación a ver a El zapatero remendón Manuel Lozano. Crecí en el Centro Cultural del Bosque, un oasis de la cultura del país. Nos honra que nos reciban en este teatro emblemático, que ha abierto brecha para marcar la pauta de lo que debe ser la creación escénica del primer mundo”.



Y subrayó: La obra de Francisco Gabilondo Soler es merecedora de estar en un marco como este.



El actor Pablo Rodríguez explicó que, además de interpretar a los niños, también representarán varios personajes en escena, e invitó a chicos y grandes a presenciar este espectáculo, en el que los mayores recordarán su infancia y los más pequeños se sumergirán en el mundo mágico de las canciones de Cri-Crí.



En su oportunidad, Jimena Parés señaló que además de recordar a los personajes más populares del mundo del Grillito cantor, los asistentes conocerán a otros no tan afamados de los que seguramente también se enamorarán.



Por último, recordó que ella y su mamá cantaban Caminito de la escuela cuando la llevaba al colegio. “Es muy bonito revisitar estas canciones, es un viaje a la nostalgia; conecta a los papás y los niños”