Los conflictos independentistas en El Sexto Estado





· Exposición que combina elementos estéticos de la ciencia ficción y el teatro de títeres para presentar la historia de una nación



· Permanecerá en la Sala de Arte Público Siqueiros hasta el 4 de noviembre



El Sexto Estado de Los Altos fue una región de la frontera entre México y Guatemala que buscó su independencia a mediados del siglo XIX. Esta exhibición, que retoma el nombre de esa nación, presenta los detalles de las disputas territoriales y sus rasgos históricos por medio de una instalación escultórica.



Naufus Ramírez-Figueroa recreó el Sexto Estado en una exposición homónima que combina elementos estéticos de la ciencia ficción y el teatro de títeres. Permanecerá hasta el 4 de noviembre en la Sala de Arte Público Siqueiros (SAPS) del Instituto Nacional de Bellas Artes.



Un juego de elementos y metáforas, como la que el artista expone a través de una serie de piernas que cuelgan desde unas cadenas en la sala denominada El Cubo. Las extremidades, de acuerdo con Naufus, representan a la gente que quiso clavar su poder en la tierra, mientras que las ataduras hacen referencia a que están esclavizados.



La directora del recinto, Taiyana Pimentel, presidió el recorrido que realizaron el artista Ramírez-Figueroa y la curadora Michele Fiedler por la instalación.

Pimentel señaló que la nueva producción de Naufus es una narrativa que genera diálogos hacia la contemporaneidad desde este lugar, que fue la casa que habitó David Alfaro Siqueiros.



También indicó que el tema que trabajó el artista trata de los primeros momentos poscoloniales del continente americano, el cual tiene una serie de dobleces políticos e ideológicos derivados de cierto posicionamiento económico.



Por su parte, Ramírez-Figueroa comentó que, ahondando sobre la identidad guatemalteca y después de leer la obra de Arturo Taracena sobre el Sexto Estado, encontró que mucha gente se identifica con esa nación olvidada.



En El Sexto Estado los asistentes podrán encontrar una reproducción del trono de Atanasio Tzul, líder de los pueblos maya-quiché y de los que formaron el gobierno indígena.



Al llegar al segundo piso apreciarán cuatro planchas de madera talladas y cubiertas de elementos que hacen referencia a las riquezas de la región. Antes de la invasión española, en los Altos de Chiapas y Guatemala, había abundancia de oro, plata, jade y obsidiana.



En el interior de la sala, los visitantes hallarán luces colocadas en las paredes que complementan la instalación, y también algunos cuadros dispersos que provocarán que deban moverse de un lugar al otro para, de esta manera, ir encontrándose con distintos elementos.