En el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia



Autores de Tierra Adentro exploran la veta ensayística de Juan José Arreola



Destacaron la gran precisión, el cuidado del lenguaje, el tratamiento de las ideas y la capacidad de observación del jalisciense


“Procedo en línea recta de dos antiquísimos linajes. Soy herrero por parte de madre y carpintero a título paterno, de ahí mi pasión artesanal por el lenguaje”: Juan José Arreola (1918-2001).



Este martes 11 de septiembre continuaron las celebraciones por la vida y obra del escritor jalisciense con la actividad Autores de Tierra Adentro comentan la obra de Juan José Arreola, organizada por la Secretaría de Cultura (SC), a través del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y su Coordinación Nacional de Literatura, en la que se evocó a quien nos legó un estilo literario único caracterizado por un magnífico uso de la lengua y un extraordinario amor por la palabra.



Como parte del ciclo Centenario de Juan José Arreola, los jóvenes escritores del Programa Cultural Tierra Adentro de la Secretaría de Cultura, Aldo Rosales Velázquez y Roberto Bolaños Godoy, compartieron parte la obra de maestro de géneros breves, y ofrecieron a los asistentes al Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia, un acercamiento fresco y novedoso al autor fundamental de las letras mexicanas, reconsiderándolo como un observador de la condición humana, que es la materia prima del ensayo.



Aldo Rosales Velázquez, autor de libros como Entre cuatro esquinas, editado por el Conaculta en 2013, y numerosas reseñas en medios de comunicación como La Jornada y El Universal, aseguró que “para los jóvenes es importante leer a Arreola, porque nos da una idea de cómo se debe trabajar el cuento en cuanto a la brevedad, y sobre lo gozoso y a la vez lo profundo que puede ser el ensayo como exploración de una época, pero sobre todo lo humano”.



La preocupación de Arreola en su veta ensayística, que encontramos en la mayoría de sus textos, ya sean cuentos o narraciones, tuvo como principales preocupaciones a la división de clases, la preponderancia de lo económico y a la cosificación de las personas, observando siempre la condición humana a través de la ficción, lo que puso de manifiesto en obras como Carta a un zapatero que compuso mal unos zapatos o Baby H.P.



En palabras de Rosales, el autor cuida al extremo las palabras para construir textos “que son asequibles desde la primera lectura; pero que también pueden ser explorados a más cabalidad por los estudiosos… Las puertas para entrar a Arreola son amplias, están abiertas para cualquier público”, aseguró el joven escritor.



En su oportunidad, el ensayista y crítico literario, Roberto Bolaños Godoy, definió a Arreola como un autor de obra accesible y diversa, cuya brevedad en sus piezas le ayuda a conectar con los nuevos lectores. “Las prácticas de lectura actuales permiten que un escritor como Arreola tenga una gran aceptación, porque es bastante accesible, conecta mucho más fácil por la brevedad, por la variedad formal y por la naturaleza lúdica de sus textos”, explicó el también y becario de la Fundación para las Letras Mexicanas, quien aseguró que Confabulario es una parada obligada para entrar a Arreola.



Los ponentes coincidieron en que Juan José Arreola dotó a las letras mexicanas de un arsenal formal y vasto, a través de un repertorio de recursos bastante amplio, nutrido tanto de lecturas de textos clásicos, como de formas textuales no necesariamente propias de la literatura.



Para los estudiosos y nóveles creadores, el jalisciense legó un repertorio para el ejercicio de la literatura, al permitirles entenderla desde muchas posibilidades textuales; con su óptica lúdica y con la lectura posmoderna de su obra, se abren enormes posibilidades de llevar todas esas formas más allá de lo que él reflexionó.



Juan José Areola fue cuentista, comediante de alta escuela, amante del teatro y la música, ensayista, narrador y poeta. Estudió Actuación en la Escuela de Teatro del INBA y actuó bajo la dirección de Rodolfo Usigli y Xavier Villaurrutia.



Director y fundador de la Casa del Lago y coordinador de ediciones de la Presidencia de la República, también colaboró en distintos programas de radio y televisión y en medios impresos como América, Novedades, Letras de México y la revista Siempre!



Merecedor de premios como el Xavier Villaurrutia, el Alfonso Reyes, el de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo, y el Nacional en Letras, durante décadas nutrió a las nuevas generaciones de literatos por medio de su taller de escritura, al cual asistieron figuras como Carlos Fuentes, Elena Poniatowska, José Agustín, Federico Campbell, Beatriz Espejo, Tomás Segovia y Gonzalo Celorio.



Como parte de las celebraciones al escritor, pilar de la literatura mexicana por su pluma imaginativa y su labor como editor y tallerista, se llevará a cabo el Homenaje a Juan José Arreola, con la participación Margo Glantz, Luz Elena Gutiérrez de Velasco y Sara Poot-Herrera, el próximo 18 de septiembre a las 19:00, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, Avenida Juárez esquina con Eje Central Lázaro Cárdenas, Centro Histórico de la Ciudad de México.



FAC