La Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México estrenó La verdad única, de Eduardo Soto Millán



· Dirigida por la batuta huésped de Rodrigo Sierra Moncayo y la presencia del compositor, la agrupación de la Secretaría de Cultura capitalina dedicó el concierto al 50 aniversario del Movimiento Estudiantil de 1968



· Con el solista invitado, el guitarrista Julio Revueltas, el recital incluyó Balada del venado y la luna, de Carlos Jiménez Mabarak; Mandrami, de Antonio Juan-Marcos; Tres piezas para orquesta, de José Pablo Moncayo, y Sensemayá, de Silvestre Revueltas



Este fin de semana la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM) llevó a cabo dos conciertos en los que realizó el estreno mundial de La verdad única, pieza del compositor mexicano Eduardo Soto Millán, en la que rinde homenaje al Movimiento Estudiantil de 1968.



Con la batuta del director huésped, Rodrigo Sierra Moncayo, el primer concierto se ofreció el sábado 27 de octubre en el Centro Cultural Roberto Cantoral en el marco de las Jornadas del INBA-SACM del Séptimo Festival Artístico de Otoño, y el segundo, el domingo 28 en la Sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli (CCOY).



La agrupación artística de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México (SCCDMX) —que además celebra su 40 aniversario—, tocó piezas de compositores mexicanos, abrió con el estreno en nuestro país de la pieza Mandrami, de Antonio Juan-Marcos (1979), la cual fue presentada en febrero de 2010 en el Anfiteatro de la Ópera de Massy, en París Francia.



La pieza dedicada por el compositor a su madre, incluye el uso del clarinete bajo, el contrafagot y el saxofón, en la que Juan-Marcos realizó una revisión con el objetivo de incorporar nuevas frases de carácter melódico que aligeran la densidad orquestal de la versión original.



Enseguida se presentó Tres piezas para orquesta. Feria, canción y danza, de José Pablo Moncayo (1947), como lo indican las notas al programa del maestro Juan Arturo Brennan, en cada parte de la pieza se distinguen los ritmos marcados, robusta y enérgica al principio y es justo a la mitad cuando se presenta un clímax de carácter dramático, para concluir con alternancia de colores orquestales.



Reconocida como una de las orquestas más importantes de América Latina, la agrupación incluyó Sensemayá, de Silvestre Revueltas, en su versión original de cámara, obra inspirada en los 17 poemas de Nicolás Guillén, basados en los derechos de la gente de origen africano, por lo que se integran ritmos afrocaribeños.



El clímax del recital llegó con el estreno de La verdad única, de Eduardo Soto Millán, con el epígrafe “hay palabras que ocultan y mienten, pero la verdad sólo una es siempre”. El guitarrista mexicano Julio Revueltas ─nieto del escritor José Revueltas, uno de los intelectuales que participó activamente en el Movimiento Estudiantil de 1968, e hijo de la pianista de jazz Olivia Revueltas─, fue el encargado de interpretar la pieza.



Con la asistencia al concierto del compositor Soto Millán, acompañado de Julio Revueltas, ambos fueron ovacionados con aplausos y flores al finalizar la presentación. Para cerrar el recital, la OFM tocó Balada del venado y la luna, de Carlos Jiménez Mabarak.



Los conciertos de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México se realizaron el sábado 27 de octubre en el Centro Cultural Roberto Cantoral, ubicado en Puente Xoco s/n, colonia Xoco, y el domingo 28 de octubre, en el Centro Cultural Ollin Yoliztli, Periférico Sur 5141, colonia Isidro Fabela.



Para conocer más acerca de los programas de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México, visite la página http://ofcm.cultura.cdmx.gob.mx/. Siga a la orquesta con el hashtag #40AniversarioOFCM.



La cartelera de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México está disponible en http://www.cultura.cdmx.gob.mx/ y en el sitio http://www.cartelera.cdmx.gob.mx; en redes sociales (Twitter y Facebook) @CulturaCDMX, siga el hashtag #CulturaCDMX.