La Fonoteca Nacional participa su pesar por el deceso del ilustre etnomusicólogo Thomas Stanford, benefactor y amigo de esta institución.



La Fonoteca Nacional informa que rendirá, el próximo 17 de enero, un homenaje póstumo al investigador que dedicó su vida a la documentación sonora y escrita de la música mexicana.



En los archivos de la Fonoteca Nacional se preservan, con gran orgullo, las imprescindibles grabaciones que el maestro realizó a lo largo de su trayectoria, las cuales merecieron el reconocimiento Memoria del Mundo que otorgó la UNESCO en 2010.



La colección Thomas Stanford tiene el registro número uno en el inventario de la institución y consta de 587 cintas de carrete, 16 audios digitales, 1 casete, 103 discos compactos, 124 archivos en formato Dat, 444 discos de 33 rpm, 12 discos de 45 rpm, 9 discos de 78 rpm, 55 DVD, 3 cintas VHS, que comprenden cinco mil piezas musicales, las cuales están disponibles para acceso público a petición del maestro.



Destacan los registros de los pueblos otomíes, totonacos, popolocas, yaquis, mixtecos, tsotsiles, tseltales, nahuas, mayas, zapotecos, amuzgos, chontales y choles, entre otros. El periodo que comprenden las grabaciones de Thomas Stanford en México es de 1956 a 2005 y constituye una invaluable aportación para los estudios antropológicos y sociológicos, así como para los trabajos de preservación de la memoria e identidad nacional.



De igual modo, la Fonoteca Nacional resguarda la colección de libros del maestro Stanford, integrada por 1,252 títulos, muchos de los cuales son primeras ediciones y fueron dados al maestro directamente por sus autores.



Además, el auditorio Murray Schafer se viste con el piano de cola Steinway que el maestro Stanford tuvo a bien donar a la Casa de los Sonidos de México para la realización de sus eventos culturales.



La Fonoteca Nacional se conduele con el gremio cultural por tan sensible fallecimiento y abraza solidariamente a su familia y amigos.