Recibe La última Sesión de Freud importante distinción gracias al éxito que logra acaparar





La obra se presentó en el Centro Cultural Helénico del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes



Aborda el debate imaginario entre el padre del psicoanálisis y el autor de las crónicas de Narnia, Clive Staples Williams





El montaje escénico La última sesión de Freud, producida por Andrés Roemer y Jorge Ortiz de Pinedo, bajo la dirección de José Caballero, obtuvo el reconocimiento que otorga la Agrupación de Periodistas Teatrales (APT) a lo mejor del teatro realizado durante el 2014.



La historia que protagonizaron Sergio Klainer y Darío T. Pie, fue destacada como la mejor obra durante la XXXII entrega de los premios que realiza la APT, venciendo las propuestas escénicas "Bajo reserva" y "Master class", que también figuraban en la categoría.



Durante el reconocimiento el también actor Jorge Ortiz de Pinedo, destacó que con este merecimiento se culmina un proyecto que fue un éxito gracias a la creación que hicieron los actores, quienes lograron que el público disfrutara de un maravilloso texto.



Bajo la coproducción del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes a través del Centro Cultural Helénico y la Ciudad de las Ideas, la obra aborda un debate imaginario entre el padre del psicoanálisis, Sigmund Freud, y el autor de Las crónicas de Narnia, Clive Staples Williams, sobre la existencia o no de una divinidad.



Temas como el amor, la vida, la muerte, el sexo, los padres, la infancia y Dios giraron en torno a la historia presentada durante ocho semanas en uno de los teatros más visitados de la Ciudad de México, el Teatro Helénico.



Klainer, quien interpreta a Freud en el marco de la celebración por 52 años de trabajo en el teatro, informó que la historia se ubica 20 días antes de la muerte de Sigmund Freud, cuando Inglaterra está a punto de entrar a la Segunda Guerra Mundial.



En ese momento ocurre el encuentro imaginario del psicoanalista, quien es ateo, con el escritor de cuentos y novelas fantásticas CS Williams, creyente católico por sus padres irlandeses. Los argumentos de uno y otro son dramatizados y generan movimientos de posible conversión.



“Presiento que esta obra va a dejar huella en el público, pero también en nosotros como actores”, indicó Klainer, quien ha participado en más de 90 obras desde su debut en el Teatro Experimental de Jalisco. “Freud es un personaje extraordinario, una de las mentes más preclaras del siglo XX y en esta obra se ubica poco antes de su muerte, con un cáncer de lengua. De aquí saldrán muchas conclusiones que sin duda generarán diálogo y debate entre el público”.

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Darío T. Pie, quién interpretó al escritor Williams, dijo que esta obra fue presentada en un momento muy interesante en el que las personas tienen muchas preguntas sobre lo que está ocurriendo en el mundo y que resurge la pregunta de si es verdad o no que los seres humanos estamos al amparo de algo o alguien.