img
Libros 2015-08-02 18:42

José Juan Tablada, poeta fundamental de las nuevas corrientes literarias de América

Este 2 de agosto se cumplen 70 años de su fallecimiento



José Juan Tablada, poeta fundamental de las nuevas corrientes literarias de América



· Como periodista llegó a publicar 10 mil artículos en 50 años



· El diplomático, escritor y profesor de Bellas Artes es considerado vanguardista



José Juan Tablada (Ciudad de México, 3 de abril, 1871-Nueva York, Estados Unidos, 2 de agosto, 1945), a 70 años de su fallecimiento, es reconocido como un poeta fundamental de las nuevas corrientes literarias de América Latina, quien además asimiló los movimientos rupturistas en el arte.



Este 2 de agosto se cumple un aniversario más del deceso de José Juan de Aguilar Acuña Tablada y Osuna, quien estudió en varias escuelas particulares de Puebla y la Ciudad de México; a sus 19 años comenzó a publicar de manera regular sus versos en el periódico El Universal, espacio donde aparecían constantemente sus poemas, etapa que se considera fundamental para el movimiento modernista de México.



En ese mismo diario, como periodista, llegó a publicar 10 mil artículos en 50 años y colaboró para El Imparcial, El Mundo Ilustrado, Revista de revistas, Excélsior, El Universal Ilustrado, La Falange y El Maestro, además de otras publicaciones en el extranjero; incluso fue considerado dentro de la segunda generación de modernistas (a quienes ya no les toca crear una tendencia artística, sino enriquecer la herencia dada).



José Juan Tablada escribió en su juventud poemas modernistas, inspirándose en Baudelaire y Laforgue para crear sensaciones exóticas, suntuosas y decadentes; uno de sus poemas en este periodo fue Ónix, dedicado originalmente a Luis G. Urbina, publicado por primera vez en el diario El siglo XIX y que después lo retomarían la Revista Azul y los periódicos El Mundo y El Universal.



En 1900, José Juan Tablada viajó a Japón; en 1911-1912, a París; salió hacía Estados Unidos en 1914 y vivió allí hasta 1918. Estos viajes influyeron de manera evidente en su obra y le ayudaron a abrir nuevos caminos para la poesía mexicana en los libros que publicó entre 1919 y 1924.



Además fue diplomático de México en Colombia y Venezuela entre 1919 y 1920; luego volvió a Nueva York, donde pasó gran parte y resto de su vida (aunque estuvo unos años en México y Cuernavaca).



En diferentes investigaciones se destaca que José Juan Tablada fue un escritor y diplomático cuyo paso por la literatura mexicana se ha visto en apariencia silenciosa, al mismo tiempo se le considera un hombre comprometido con sus inquietudes y necesidades estéticas, estudiado como uno de los principales poetas vanguardistas en el ámbito de la literatura hispanoamericana, debido a que supo asimilar, adoptar y renovar novedosas manifestaciones poéticas.



José Juan Tablada tuvo una fuerte participación política a lo largo de su vida; fue opositor del gobierno de Francisco I. Madero y partidario de Victoriano Huerta. Durante el periodo presidencial de Venustiano Carranza fungió como secretario de Servicio Exterior, viéndose en la necesidad de trasladarse a Venezuela para dedicarse a la labor cultural.



Respecto a la época moderno, en 1900 José Juan Tablada, financiado por Jesús E. Luján, viajó a Japón. Su travesía que incluyó recorrido por tren a San Francisco y por vía marítima hacia Yokohama, quedaron plasmadas en unas crónicas de viaje que publicó principalmente en la Revista Moderna y la Revista Azul, y que posteriormente la UNAM antologó en un libro titulado En el país del Sol. Crónicas japonesas de José Juan Tablada.



De este autor mexicano se dice que la literatura oriental le amplió las expectativas poéticas, mostrando una estética de la contemplación, para en 1919 publicar Un día… poemas sintéticos.



De José Juan Tablada se considera que su mayor contribución literaria radica en que logró equiparar la pureza del haikú e insertarlo a las formas poéticas de principios del siglo XX, modelarlo de tal forma que adquiriera un estilo propio: el haikai, poemas sintéticos que así denominó Tablada.



Dichos haikáis los escribió influenciado por los poetas japoneses Shiyo y Basho, por ello fue considerado por la historia literaria en el introductor de esta forma de castellano, logrando concretar en un poema breve la belleza del instante y la contemplación. Uno de los libros que Tablada escribió experimentando el haikú fue El jarro de flores, publicado en 1922.



El japonismo de Tablada es todo un tema que se concretizó no sólo en los haikús, sino en dos libros de prosa: Hiroshigué: el pintor de la nieve y de la lluvia, de la noche y de la luna (1914), biografía lírica al estilo hermanos Goncourt, y En el país del sol (1919), serie de crónicas, algunas correspondientes a su viaje a Japón en 1900. Con La feria. Poemas mexicanos (1928), su último libro orgánico, José Juan Tablada también participó en la promoción del entonces emergente nacionalismo revolucionario, otra vena estética importante.



En el libro Antología de la poesía mexicana moderna se explica que el interés del escritor en Japón produce algunos poemas de ambiente oriental exótico, pero también la realización de poemas japoneses.



Se considera de Tablada que al llevar a la poesía mexicana por nuevas direcciones, estimular el interés de nuevas formas estéticas, en literaturas extranjeras y en las otras artes, contribuyó de manera importante a la entrada de México en la época contemporánea.



José Juan Tablada también fue profesor en Bellas Artes y en la preparatoria. Diplomático en diversos países. En 1923 fue nombrado el Poeta de la Juventud, y en 1928 se convirtió en miembro de la Academia Mexicana de la Lengua. Años más tarde, en 1945, ocupa el lugar de vicecónsul en Estados Unidos, falleciendo meses después. Sus restos, los cuales fueron repatriados en 1946, reposan en la Rotonda de los Hombres Ilustres.



DAF

Mas Articulos