img
música 2015-03-20 14:08

Monta Kawabata Makoto un laboratorio musical en el Teatro de la Ciudad

Monta Kawabata Makoto un laboratorio musical en el Teatro de la Ciudad



El músico de culto japonés presentó su faceta más experimental en un concierto único de improvisación en el recinto de Donceles



El rock psicodélico y experimental del músico japonés Kawabata Makoto resonó en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris del Sistema de Teatros, después de casi una década de no visitar México.



La oportunidad de experimentar por primera vez en México el sonido como solista del guitarrista de culto japonés, así como ser testigo de su primera colaboración en vivo con el cineasta mexicano Gabriel Santamarina, fue apreciada sobre todo por un público joven que llenó el recinto en este excepcional concierto de improvisación.



La presentación fue posible gracias al sello y colectivo Otoño en Hiroshima, focalizado en la profesionalización de new media, producción y curaduría de sonidos inclasificables, así como al apoyo de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.



Puntual, el artista salió al escenario a las 20:30 horas del miércoles 18 de marzo y ofreció una sencilla reverencia a los asistentes para ir directo a su silla situada al centro de la plataforma, donde comenzó a experimentar con su guitarra. Al mismo tiempo, se proyectaba una propuesta visual en una gran pantalla, en una simbiosis entre música e imagen.



Con una melena rizada que cubría su rostro, una vestimenta sencilla en color negro, con playera y pantalones acampanados con apenas un tinte de rojo, Makoto hizo honor a su estilo taciturno al permanecer sentado de su lado derecho durante toda la presentación.



La atmósfera creada en el escenario por Makoto osciló entre sonidos armónicos y disonantes, posibles al tocar con total libertad creativa su guitarra Stratocaster y los sintetizadores.



La música creó imágenes y sensaciones cósmicas, tétricas y agresivas, a través de una variación constante de un género a otro: de la psicodelia, el kraut, el post rock, al experimental, en lo que fue una fina muestra de virtuosismo y versatilidad.

Dicha sonoridad se mimetizó con la poética de los visuales realizados por el artista mexicano e investigador de estudios japoneses Gabriel Santamarina, con imágenes cargadas de contenidos representativos de la cultura y tradición japonesa, de filosofías orientales, chamanismo y visiones caleidoscópicas.

La serie de proyecciones audiovisuales fue seleccionada para la ocasión y mezclada en vivo por un VJ –mezclador de audio y video-- durante el show en un montaje caracterizado por imágenes superpuestas, cuyo simbolismo, color y ritmo cambiaba de acuerdo a la musicalidad.



Escritura, paisajes y arquitectura japonesa; montañas, el mar, mujeres semidesnudas, expresiones corporales agresivas, abanicos, esculturas budistas, guerreros japoneses, gallinas, todos cupieron en el escenario. Y la proyección del misticismo japonés se hizo patente entre una gama de azules pasivos, rojos violentos, negros abatidos y colores chillantes que hacían pensar en el universo.



De esta forma el espectáculo se adentró en el caos, para salir abruptamente a un estado de serenidad, en una experiencia que duró alrededor de dos horas.



Nacido en Osaka, Kawabata Makoro es considerado una auténtica leyenda de la música psicodélica japonesa, reconocido sobre todo por ser el fundador del legendario colectivo Acid Mothers Temple, con el cual ha producido más de 100 discos.



Activo desde 1976, inició su trayectoria como guitarrista, violinista, compositor y líder de varias agrupaciones de su país contando con una amplia discografía, entre proyectos en conjunto y en solitario que evocan la cultura tradicional y la espiritualidad japonesas.



Se ha presentado en los foros y festivales más renombrados del circuito de la música experimental a nivel internacional al lado de Acid Mothers Temple, o con otras agrupaciones dentro de la escena underground enfocada en crear nuevas maneras de viajar a través de las ondas sonoras.

Mas Articulos