Ik dietrick fon, el inusitado romance de Petreck Boll, una historia de amor fantástica de Martín Zapata



· Después de recorrer 11 estados de la República, la puesta en escena se presentó en el Teatro Orientación del Centro Cultural del Bosque



· El 2 de agosto concluye el 14º. Festival de Monólogos



Asentado, casi hasta el fastidio, en la cotidianidad, la vida de Petreck Boll emerge hacia un encuentro inusual que trastocará su vida. Él, oficinista de una antigua compañía de telégrafos, abre a través del ejercicio del habla un espacio de reunión con aquel inusual amor.


Éste fue el punto de partida de Ik dietrick fon, el inusitado romance de Petreck Boll, puesta escénica de Martín Zapata, la cual se presentó en el Teatro Orientación del Centro Cultural del Bosque del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) como parte del 14° Festival de Monólogos. Teatro a una Sola Voz 2018.


Una fascinante obra para un solo actor, cuyas demandas histriónicas y menudos recursos escenográficos ofrecen una total y compleja historia. La trama es sencilla, un hombre se enamora de un fantasma, pero la construcción despliega un rico abanico de emociones. No es para menos, ya que el director había trabajado con esta obra, como escritor, director y actor, por 24 años y ahora la presenta junto a su hijo, el actor Tadeo Zapata.


“Hay varias líneas de investigación que explora, una de las primeras fue la formación del lenguaje, pues la obra trabaja con el español y un lenguaje inventado, que tiene sonoridades de alemán”, explicó en entrevista Martín Zapata.


Hacer las combinaciones acertadas de los idiomas, en los momentos expresivos precisos, no sólo funcionó para que el idioma inventado se entendiera, sino para darle énfasis a las emociones, ya que la obra, en la que aparecen diversos personajes, es ejecutada por una sola persona.


El otro reto, dijo, fue hacer un monólogo dialogado: No tiene estructura de soliloquio, sino que aparecen varios personajes, quienes además dialogan.” El lenguaje corporal, a través del ejercicio de la pantomima, fue uno de los ejes importantes para resolver no sólo la identidad de cada personaje, sino “el espacio, ya que la obra transita en la calle, la oficina, un bar y el departamento de Zarah, la fantasma”.


La historia recupera una leyenda de la época colonial. Cuando surgió, ya tenía algunas ideas de hacer una historia de amor sobre un oficinista, la actriz de cine y con una especie de final inesperado. Poco a poco se fue construyendo la historia, hasta que cayó este final inesperado, donde el hombre descubre que la mujer con quien pasó la noche anterior es un fantasma.


“Fue un trabajo arduo reponerla, trabajamos casi dos años y la estrenamos en diciembre pasado. Es el mismo montaje, pero Tadeo imprime a esta versión su propia interpretación y sólo cambiaron algunos detalles”.


La obra es un viaje hacia el interior de los deseos y sentimientos del protagonista. Cargada de humor y un poco de escarnio, permite develar la naturaleza humana, a través de una historia de amor fantástico.



Ik dietrick fon fue la cuarta obra en presentarse en el marco de 14º. Festival de Monólogos. Teatro a una sola voz, el cual arrancó el 11 de julio en Sonora, posteriormente pasó por Sinaloa, Durango, Coahuila, Tamaulipas, Jalisco, Colima, Guanajuato, San Luis Potosí, Michoacán, Veracruz, para terminar en la Ciudad de México este 2 de agosto en el Teatro Orientación del Centro Cultural del Bosque del Instituto Nacional de Bellas Artes, Reforma y Campo Marte, colonia Chapultepec Polanco. Metro y Metrobús Auditorio.