El mural efímero Volcaduras, de Carlos Clausell, representa un acto de libertad artística
· En el Museo de la Ciudad de México se exhibe la obra del bisnieto del pintor impresionista Joaquín Clausell, quien habitó el recinto histórico a principios del siglo XX
· El Secretario de Cultura local expresó que ambos artistas comparten sobre todo un amor por la libertad
El mural efímero Volcaduras representa el acto de libertad artístico con el que trabajó Carlos Clausell, consideró el Secretario de Cultura local, Eduardo Vázquez Martín, al inaugurar la obra la noche del jueves 13 en el Museo de la Ciudad de México, que permanecerá en exhibición hasta el 30 de septiembre.
Eduardo Vázquez Martín expresó que Joaquín ─quien habitó el palacio a principios del siglo XX y es considerado el máximo representante del impresionismo en México─ y Carlos Clausell comparten sobre todo un amor a la libertad, no sólo un amor por el paisaje y una cierta manera de retomar la abstracción.
El antiguo Palacio de los Condes de Santiago de Calimaya, hoy Museo de la Ciudad de México, alberga una de las obras más importantes de Joaquín Clausell: La torre de las mil ventanas, que dibujó en las paredes del que fuera su estudio. Esta vez, un piso abajo, Carlos Clausell intervino los muros de la Sala Salvador Novo con su mural efímero.
El histórico palacio, apuntó Eduardo Vázquez, tiene entre sus tesoros “el trabajo de Clausell, que es casi un secreto por más que insistimos en divulgarlo; su mural tiene la capacidad de no perder su misterio y se resiste a entrar en los grandes circuitos de las multitudes y de los ríos turísticos; sigue siendo un espacio que requiere una mirada, una cierta concentración”.
Luego de recordar que la familia Clausell ha sido importante para la historia del Museo de la Ciudad de México, el Secretario de Cultura local comentó que Carlos Clausell trabajó su mural efímero “con entera libertad y hasta con un poco de azar”, lo cual, dijo, es muy importante porque “si los artistas no tienen libertad, las sociedades no la van a encontrar nunca; así que quiero agradecer y felicitar este acto de libertad”.
Carlos Clausell comentó que fue un honor y un gusto trabajar en el museo, no sólo por el tamaño y la importancia del lugar, sino porque aquí vivieron sus ancestros, y explicó que en su mural trató de hacer una conversación entre las dos figuras centrales del trabajo pictórico: una pirámide humanizada y una luna.
“Esa conversación es una contemplación y un juego con los tiempos; es también pensar lo pequeños que somos los humanos en la historia y de la trascendencia, pero al mismo tiempo pensar que todo existe solamente en nuestro sentido, cuando lo vemos, lo observamos, cuando es parte de nosotros y eso fue lo que traté de hacer, que hubiera ese diálogo contemplativo de una pirámide, la historia y nosotros como espectadores”, expuso el artista.
Josué Ramírez, colaborador del Museo de la Ciudad de México, dijo que el título del mural de Carlos Clausell, Volcaduras, “más que describir la pieza habla de la actitud que el artista ha mantenido a partir de la experimentación visual”.
Tanto sus técnicas de composición, como el montaje de las obras que ha producido a lo largo de más de 30 años, añadió Josué Ramírez, “es variable, Clausell va de un tema a otro sin necesariamente buscar un estilo o un conjunto de series articuladas. Ha logrado volcarse sobre la superficie del lienzo o el muro y busca expresar revolturas emotivas e inteligibles con asertividad”.
En la inauguración del mural efímero, también estuvo presente José María Espinasa, director del Museo de la Ciudad de México.
En Volcaduras, Carlos Clausell presenta los resultados de una experimentación visual neo-expresionista, en la que con el uso de materiales de distintas texturas, escobas, rodillos y enormes pinceles creados con tallos de bambú representa un diálogo temporal en un lenguaje áspero y contundente.
Carlos Clausell nació en la Ciudad de México en 1963. Estudió en importantes centros como la escuela Massana de Barcelona, The Academy of Art de Amberes y la Art Students League de Nueva York. Desde la conclusión de su formación académica ha hecho de la pintura una forma de vida.
La exposición del mural efímero Volcaduras podrá visitarse en la Sala Salvador Novo hasta el domingo 30 de septiembre de 2018. El Museo de la Ciudad de México se ubica en Pino Suárez 30, Centro Histórico; abre de martes a domingo, de 10:00 a 18:00 horas. La entrada a las exposiciones tiene un costo de 32 pesos, con 50 por ciento de descuento a estudiantes y maestros e INAPAM, con credencial vigente. El miércoles es entrada libre.