Enrique IV se despide del Teatro de las Artes del Cenart


Ø Las últimas funciones serán el jueves 1, el viernes 2 y el sábado 3 de octubre a las 19:00 horas y el sábado 4 a las 18:00


Una obra muy poderosa, con la que te enganchas, es Enrique IV, primera parte de William Shakespeare, afirmó Gabriela Núñez, la única mujer en el elenco de esta puesta en escena de la Compañía Nacional de Teatro que terminará temporada el 4 de octubre en el Teatro de las Artes del Centro Nacional de las Artes (Cenart).



“La obra maneja una vasta gama de emociones, que de acuerdo a tu historia personal, tu edad, contexto, te engancha, porque aborda temas como la usurpación, la ilegalidad, historias de mujeres con hombres, de padres con hijos, de traiciones, de redención. Aunque no seas un experto en Shakespeare, te atrapa”.



Enrique IV, primera parte forma parte del repertorio de la Compañía Nacional de Teatro desde 2012, cuando se presentó con gran éxito en la Corrala del Mitote, escenario armado en el Zócalo capitalino y, posteriormente, en la Plaza Ángel Salas del Centro Cultural del Bosque. También ha sido escenificada en The Globe, como parte de las Olimpiadas Culturales en Londres, y en el Bitola Shakespeare Festival, en Macedonia.



Por primera vez en México, el montaje se presenta en un lugar cerrado, después de la experiencia en Macedonia el año pasado, comentó la actriz que ingresó a la Compañía en 2008.




“La experiencia es diferente, ya que, en un teatro cerrado, la atención se dirige hacia el escenario y permite que los mensajes lleguen más claramente, que se entienda mejor la historia y que la gente la perciba desde sus asientos sin la distracción del ruido sonoro, visual y ambiental. Es muy difícil estar en cielo abierto y no distraerte.



“Como actores, nos ayuda a matizar un poco más. En un espacio abierto hay que proyectar mucho, sostener la voz para que se entienda y articular muy bien. Es una delicia estar en teatro cerrado, aunque la Corrala tiene su encanto, pues es un teatro muy directo que requiere de mucha energía y también lo disfruto muchísimo. Haber estado en el Globo es una de las cosas más especiales que me han pasado como actriz”.



Al hablar sobre su participación en el montaje, comenta que ser la única mujer en escena “es una experiencia fantástica. Mis compañeros me han abierto sus brazos. Trabajo a la par de ellos, y eso es parte del equilibrio. Soy la presencia femenina en los personajes que lo requieren e incluso hago de guerrero. Espero que a la hora de pelear no me vea débil.



“Desde el principio tuve que diferenciar un papel de otro: la posadera es un personaje muy distinto a Lady Percy o Lady Mortimer. Marco Antonio Silva, encargado del trabajo corporal, me ayudó a definir los personajes, a encontrar una corporalidad que los distinguiera para que no perdieran sentido, ni intención ni verdad.



“Soy muy afortunada, pues los personajes, al ser tan diversos, me permiten explorar distintos matices: la inteligencia y la pasión de Lady Percy o el poder y el desparpajo de la posadera. El submundo, del cual ella es ama y señora, me da la oportunidad de dar rienda suelta a toda la vulgaridad que requiere el rol. En la taberna todo se potencia, todo está exaltado, y Lady Mortimer me permite mostrar la fragilidad de esta mujer que ama, cede y está dispuesta a acompañar a su amor a dondequiera que él vaya. Son distintos matices.



“Así como a nosotros nos hace bien el teatro, este puede hacer un poquito por alguien: ayudarlo a reconocerse, moverle algo en su vida interior, en su pensamiento o hacerlo reír un rato. Cambiar la vida de la gente es aspirar demasiado, pero sí deseamos llegar a muchas personas, por lo que invitamos a todo el público a vivir una experiencia que le sirva de algo en su vida”, finalizó la actriz.



Las últimas funciones de Enrique IV, primera parte en el Teatro de las Artes del Cenart serán el jueves 1, el viernes 2 y el sábado 3 de octubre a las 19:00 horas y el sábado 4 a las 18:00.