“Inició su carrera con una canción, dedicada a las áridas regiones de la América del Norte en
honor de la frontera, Dos horas de balazos se entendía más acá que en el centro de la ciudad” dijo
Flores Durand en su explicación.
Nacido en uno de los barrios más viejos y tradicionales de la capital mexicana Flores retrató con
sus canciones un perfil del citadino promedio, y recreó las características del mexicano.