El legado grecolatino que se sustentó en la apreciación de las culturas griega y romana fue notorio en la Europa Medieval al influir en el pensamiento de la sociedad del Viejo Continente durante más de quince siglos.
Para esta exhibición se han unido las piezas emblemáticas de las colecciones del Museo Nacional de San Carlos, el Museo Franz Mayer y el Museo Soumaya, con un total de 60 obras de arte europeo.
La Madona con el Niño y dos ángeles de Niccolò di Ser SozzoTegliacci, el anónimo flamenco
Santo entierro, una madera tallada en el siglo XV son algunas de las obras que más
impresionaron al público.